En general, los «dispositivos de salud» magnéticos son un desperdicio de dinero. Sin embargo, los científicos desafiaron a esa regla general con un casco magnético que encogió significativamente un tumor cerebral letal sin la necesidad de una cirugía invasiva. Todo desde la casa del paciente.
El estudio en cuestión comenzó con un paciente que se está tratando con glioblastoma, la forma más letal de cáncer de cerebro. El paciente ya se había sometido a tratamientos convencionales y extremos, incluida la escisión quirúrgica radical, la quimioradioterapia y la terapia con genes experimentales, todos los cuales no curaron la condición.
Los investigadores utilizaron un procedimiento aprobado por la FDA conocido como tratamiento de uso compasivo para probar un nuevo método de tratamiento que involucre los campos magnéticos oscilantes. El paciente llevaba un casco con imanes permanentes giratorios que generaban campos magnéticos oscilantes con frecuencia precisa y perfiles de sincronización. El paciente inicialmente llevaba el casco durante dos horas bajo supervisión antes de regresar a casa y usarla hasta seis horas con asistencia de su esposa.
Lamentablemente, el paciente murió como resultado de una lesión no relacionada. Sin embargo, esto permitió a los científicos examinar los resultados con mayor detalle. La familia consintió amablemente a los investigadores que realizan una autopsia para determinar qué tan bien funcionó el tratamiento.
Y resulta que el tumor se encogió en un 31%. Dado que el resultado se obtuvo sin el uso de la cirugía o la quimioterapia, vale la pena explorar aplicaciones futuras. Sin embargo, como es el caso con la mayoría de los avances médicos, se requieren pruebas adicionales y resultados de repetición.
No obstante, si se replican los hallazgos, pueden allanar el camino para un tratamiento nuevo y menos invasivo para algunos de los cánceres más agresivos. cortesía de engadget.